Cómo mejorar la inteligencia emocional en la gestión de recursos humanos

Tendencias para desarrollar la inteligencia emocional en el siglo XXI

Tendencias para desarrollar la inteligencia emocional en el siglo XXI

 

Iniciemos con una nota de la EAE Business School, la cual advierte: “La alta inteligencia emocional en el trabajo es resultado de la experiencia. Pero ojo, eso no quiere decir que sea una facultad exclusiva de directivos o gerentes con muchos años de desempeño al frente de un cargo de estas características. También se puede entrenar o cultivar con consejos prácticos” 

Es decir, las personas la pueden trabajar para irla desarrollando poco a poco como un hábito, el cual se va mezclando con la experiencia para convertirse en una fortaleza para el ámbito profesional y personal.  

Un estudio de Harvard Business Review, asegura que los equipos de trabajo con un alto nivel de inteligencia emocional superan a los equipos con bajo nivel de inteligencia emocional en un 20 % en términos de desempeño y productividad.  

En la actualidad, el desarrollo de la inteligencia emocional es una tendencia y necesidad creciente en diversas áreas de la vida. Reconocer, comprender y gestionar nuestras emociones y las de los demás es crucial para tener éxito y bienestar en un mundo cada vez más interconectado. Desde Staffing, exploraremos las más relevantes para desarrollar la inteligencia emocional en el siglo XXI y cómo aplicarlas en la vida diaria. 

 

El poder de tratarnos con amabilidad 

La autocompasión emergió como una tendencia importante en el desarrollo de la inteligencia emocional. Implica reconocer y aceptar nuestras imperfecciones sin juzgarnos severamente. Practicar la autocompasión nos ayuda a desarrollar una actitud más amable hacia nosotros mismos y a cultivar la resiliencia emocional, pero -también- entender que los demás no son perfectos, sobre todo en el aspecto laboral, donde muchas veces queremos llegar a crear proyectos de forma rápida, sin errores y cuestionamientos.  

 

La nueva cara del liderazgo 

En el ámbito laboral, el liderazgo emocional es el alma de un trabajo exitoso. Los líderes emocionalmente inteligentes son capaces de comprender y gestionar sus propias emociones, así como las de sus equipos. Promueven un entorno de trabajo positivo, fomentan la colaboración y la motivación, y toman decisiones informadas por la inteligencia emocional, lo que conduce a un mayor rendimiento y satisfacción laboral. 

 

Mindfulness: El arte de vivir el presente 

El mindfulness o atención plena es otra tendencia en auge para el desarrollo de la inteligencia emocional. Consiste en prestar atención consciente al momento presente, sin juzgar. Practicarla ayuda a conectar con nuestras emociones, desarrollar la autoconciencia y regular nuestras respuestas emocionales de manera más efectiva. 

Así se evitarán discusiones innecesarias en la oficina que desgastan la convivencia laboral y pueden afectar el ámbito personal.  

 

Empatía digital: La inteligencia emocional en un mundo tecnológico 

En la era digital, la empatía evolucionó hacia el ámbito virtual. La empatía digital implica comprender y responder adecuadamente a las emociones de las personas a través de la tecnología. El desarrollo de esta habilidad es esencial para establecer relaciones significativas en línea y fomentar una comunicación empática a través de las redes sociales y otras plataformas digitales. 

En los trabajos remotos o híbridos, hay que saber comunicarse y entender al otro en las acciones laborales, para no desenfocar respuestas o contextos que lleven a malinterpretaciones, haciendo perder la productividad y afectando el clima laboral.  

 

Educación emocional: Formando las habilidades del futuro 

Fomentar y trabajar en la educación emocional es clave en los sistemas educativos. Reconocer la importancia de enseñar habilidades emocionales desde una edad temprana ayuda a formar individuos más resilientes y capaces de gestionar sus emociones. Las escuelas están implementando programas específicos para desarrollar la inteligencia emocional en los estudiantes y prepararlos para los desafíos del siglo XXI. 

 

Inteligencia emocional artificial: La intersección de la tecnología y las emociones 

Es una tendencia emergente que combina la inteligencia artificial con la comprensión y respuesta a las emociones humanas. A través del uso de algoritmos y reconocimiento de patrones, se buscan crear sistemas capaces de interpretar y responder emocionalmente a los usuarios. Esta tendencia tiene aplicaciones en áreas como las de atención al cliente, terapia virtual y asistentes virtuales emocionalmente inteligentes. 

 

Resiliencia emocional: Fortaleciendo nuestra capacidad de adaptación 

En un mundo en constante cambio y con múltiples desafíos, la resiliencia emocional, implica la capacidad de recuperarse rápidamente de situaciones adversas, aprender de ellas y adaptarse a los cambios. Desarrollarla permite manejar el estrés, superar obstáculos y mantener un equilibrio emocional saludable, lo que contribuye a nuestro bienestar general, aumentar la concentración y a ser más eficientes en lo laboral.  

Desarrollar la inteligencia emocional es más que necesario en el siglo XXI. La autocompasión, el mindfulness, la empatía digital, la educación y el liderazgo emocional son solo algunas de las áreas en las que podemos enfocarnos para mejorar nuestra capacidad de comprender y gestionar nuestras emociones.  

Al incorporar estas tendencias en nuestra vida diaria, tanto cotidiana como laboral, estaremos preparados para enfrentar los desafíos emocionales que nos presenta el mundo actual y cultivar relaciones más saludables y significativas a nivel personal y profesional. 

Cómo las herramientas de IA han favorecido y desfavorecido procesos de recurso humanos

Las herramientas de inteligencia artificial en los procesos de recursos humanos

Las herramientas de inteligencia artificial en los procesos de recursos humanos 

 

Imagina un escenario futurista donde los algoritmos se entrelazan con el ingenio humano para crear un entorno laboral más eficiente, inclusivo y lleno de potencial. ¡Bienvenidos al mundo donde la inteligencia artificial y los recursos humanos se unen en una sinfonía innovadora y transformadora! 

 

En esta era digital deslumbrante, las herramientas de inteligencia artificial (IA) encontraron un sector donde dan un gran aporte, se trata de los departamentos de recursos humanos; allí tienen una caja de posibilidades infinitas. Desde el reclutamiento hasta el desarrollo del talento, la IA irrumpió en escena como un socio inteligente que mejora los procesos tradicionales y da lugar a un futuro más productivo.

 

Ahora, hay un universo mágico sobre el desarrollo y retención del talento, en el cual la inteligencia artificial se convierte en un asistente sagaz, puesto que los datos se transforman en conocimiento, permitiendo a los profesionales de recursos humanos identificar habilidades ocultas, oportunidades de crecimiento, diseñar planes personalizados para el desarrollo de cada individuo y estrategias de retención. 

 

Miremos -en detalle- los beneficios significativos tanto para los profesionales de RR. HH. como para las organizaciones en general. 

 

Reclutamiento y selección más eficientes 

Uno de los desafíos clave de las áreas de recursos humanos es encontrar a los candidatos ideales para una posición. Aquí es donde la IA demostró ser invaluable. Con algoritmos avanzados de aprendizaje automático y procesamiento de lenguaje natural, analiza y evalúa grandes volúmenes de currículums, identifica habilidades relevantes y compara candidatos con los requisitos del puesto. Acelera el proceso de selección y reduce el sesgo humano al centrarse en datos objetivos.  

 

Entrevistas basadas en IA 

Las entrevistas en persona son una parte crucial del proceso de selección, pero también llegan a ser costosas y consumen bastante tiempo. La IA abrió posibilidades, mediante el uso de chatbots y análisis de voz, en generar entrevistas virtuales interactivas con los candidatos, analizando su lenguaje, tono y respuestas para evaluar su idoneidad.  

 

Desarrollo y retención del talento 

La IA no solo se limita al proceso de contratación, también da calidad al desarrollo y retención del talento. Mediante el análisis de datos, identifica patrones y tendencias en el desempeño de los colaboradores, detectando áreas de mejora y oportunidades de desarrollo personalizado.  

Dan la alternativa de predecir el riesgo de rotación al analizar factores como la satisfacción laboral, el compromiso y la retroalimentación del empleado. Esto permite intervenir de manera proactiva para retenerlos y mejorar el compromiso general en la organización. 

 

Mejor toma de decisiones 

Respalda la toma de decisiones en los recursos humanos, al analizar grandes cantidades de datos, genera información y recomendaciones basadas en evidencia para asistir a los profesionales de RR.HH.  

 

Mayor seguridad y gestión de riesgos  

Gracias a la IA, también se logran analizar posibles riesgos y problemas de cumplimiento en la gestión de recursos humanos, como brechas de seguridad de datos, cumplimiento normativo o problemas de privacidad. Al detectar estos problemas de manera temprana, las organizaciones toman medidas preventivas y mitigan posibles consecuencias negativas. 

 

Aspectos que la IA aún no puede del todo gestionar, precisar o remplazar: 

Las herramientas de IA están revolucionando los procesos de recursos humanos al proporcionar una mayor eficiencia, precisión y objetividad en diversas áreas, como el reclutamiento, la selección, el desarrollo y la retención del talento, sin embargo, hay que seguir evolucionando para que sean más precisos, te compartimos cuatro aspectos que se deben tener en cuenta:

  1. Falta de contexto humano: En algún momento, la IA carece de la capacidad de comprender el contexto humano y las sutilezas que son importantes en los procesos de recursos humanos.  Los aspectos y decisiones relacionados con la contratación, evaluación del rendimiento y desarrollo profesional a menudo requieren de un enfoque holístico que tenga en cuenta factores subjetivos difíciles de cuantificar, como la intuición, el juicio y la empatía. 
  2. Pérdida de la experiencia humana: La interacción humana es esencial. Los candidatos y colaboradores se benefician de la comunicación y el apoyo personalizado que solo los profesionales brindan. Al confiar en la IA, se corre el riesgo de perder el elemento humano y reducir la calidad de la experiencia para los colaboradores, esto siempre hará la diferencia.

     

  3. Privacidad y seguridad de los datos: El usar IA en los procesos implica el manejo y procesamiento de grandes cantidades de información personal y confidenciales. Esto plantea preocupaciones sobre la privacidad y la seguridad de los datos, ya que existe el riesgo de brechas de seguridad y uso indebido de la información.

     

  4. Falta de transparencia y argumentos explicativos: La inteligencia artificial a menudo es considerada como una “caja negra”, lo que significa que los resultados generados por los algoritmos no son fácilmente explicables o comprensibles para los usuarios finales. Esta falta de transparencia llevaría a la desconfianza tanto en los colaboradores como en los candidatos, quienes cuestionarían las decisiones tomadas por sistemas de IA sin entender cómo se llegó a ellas. 

 

Claramente, la inteligencia artificial no reemplaza a los especialistas, sino que los empodera al proporcionarles información valiosa y liberar tiempo para que se enfoquen en tareas más estratégicas y de alto valor. Los recursos humanos están destinados a tener una sinergia poderosa en la gestión del talento en la era digital, pero hay que tener en cuenta los contras para no caer errores o en algunas brechas.   

Mente sana, trabajo exitoso: la salud mental en el ámbito laboral

Mente sana, trabajo exitoso: la salud mental en el ámbito laboral

Mente sana, trabajo exitoso: la salud mental en el ámbito laboral

 

La importancia de cuidar la salud mental en el trabajo radica en varios aspectos. En primer lugar, está directamente relacionada con la productividad y desempeño laboral de los colaboradores. Cuando ellos tienen un buen estado de bienestar emocional, son más propensos a ser productivos, creativos y comprometidos con su trabajo. 

 

Asimismo, la protección de la salud mental en el trabajo reduce el ausentismo laboral. Las causas relacionadas con problemas de salud mental son una de las principales razones por las cuales los colaboradores no asisten al trabajo. Al promover un ambiente saludable, las organizaciones pueden minimizar el ausentismo y mantener la continuidad en sus operaciones. 

 

Dado que este es un tema urgente, desde la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), recientemente, se hizo una solicitud para que se tomen medidas sobre los problemas de salud mental en el trabajo.  

 

La OIT publicó que “se estima que cada año se pierden 12.000 millones de días de trabajo debido a la depresión y la ansiedad, lo que cuesta a la economía mundial casi un billón de dólares. Hoy se publican dos nuevas publicaciones que pretenden abordar esta cuestión: las Directrices de la OMS sobre salud mental en el trabajo y una nota conjunta de la OMS y la OIT”.  

 

Este es un panorama que deja muchas incógnitas y desafíos para hacerle frente a la problemática. Hay que advertir que la salud mental no solo se ve afectada por factores laborales, sino también por factores fuera del ámbito.  

 

Cada individuo tiene diferentes estilos de afrontamiento y experimenta situaciones fuera del trabajo que influyen en su estado mental. Por lo tanto, es fundamental que las áreas de Gestión Humana y Salud y Seguridad en el Trabajo (SST) implementen herramientas y programas que permitan el monitoreo continuo de la salud mental de los trabajadores y brinden el apoyo necesario. 

 

Salud mental en el trabajo, más necesaria que nunca  

La salud mental se caracteriza por contribuir a mantener un buen estado de bienestar emocional, psicológico y social. También se relaciona directamente con la forma en que cada individuo afronta situaciones de estrés, la manera de relacionarse y la forma de tomar decisiones.  

 

La OMS asevera que el trabajo decente apoya la buena salud mental, siendo fundamental el compromiso por parte de los empleadores para mantener ambientes de trabajo seguros y saludables, basados principalmente en reducir las posibilidades de sobre carga laboral, conflictos interpersonales y realizando el continuo monitoreo a los factores de riesgo psicosociales para la implementación de las acciones preventivas o correctivas a las que haya lugar. 

 

Para las organizaciones promover el cuidado de sus colaboradores, -en gran medida- asegura una productividad adecuada, logrando que se amplíe el enfoque orientado al cumplimiento de los objetivos organizacionales y la reducción de algunas causas que generan ausentismo laboral.  

 

Los empresarios deben conocer factores de riesgo psicosociales que son catalogados como un conjunto de situaciones o sucesos que generan, a nivel intralaboral y extralaboral, afectación a la salud mental:

 

  • Cargas, responsabilidades o ritmo de trabajo excesivos.  
  • Horarios de trabajo prolongados. 
  • Cultura organizacional que permite malos tratos.  
  • Formas inadecuadas de liderazgo.   
  • Funciones laborales poco definidas.   
  • Falta de capacidades individuales para el desarrollo de la labor.  
  • Inseguridad laboral.  
  • Remuneración deficiente.  
  • Violencia, acoso u hostigamiento.   
  • Demandas de trabajo que generan conflicto con las relaciones familiares y sociales.  

 

El papel de los empleadores 

 

Existe la necesidad imperativa de tomar planes de acción que abarquen medidas como las siguientes:  

1. Apoyar a los trabajadores que enfrentan problemas de salud mental 

La primera y más importante medida que los empleadores tienen que asegurar, es brindar apoyo y comprensión a los colaboradores que están experimentando problemas de salud mental. Esto implica crear un entorno de trabajo que sea abierto, inclusivo y receptivo a las necesidades emocionales. Los gerentes y líderes deberían ser capacitados para reconocer las señales de angustia mental y ofrecer el apoyo adecuado, ya sea a través de la remisión a servicios de asesoramiento o brindando ajustes razonables en el entorno laboral. 

 

2. Identificar y abordar los factores de riesgo psicosocial 

La Resolución 2764 de 2022 establece la importancia de identificar los factores intralaborales que afectan la salud mental de los trabajadores. Las organizaciones tienen herramientas como la encuesta de riesgo psicosocial para evaluar el ambiente laboral y detectar posibles desencadenantes de estrés o ansiedad. Con base en los resultados, se desarrollan programas de intervención específicos que aborden estos factores de riesgo y promuevan un entorno de trabajo más saludable. 

 

3. Programas de promoción y prevención 

Además de abordar los factores de riesgo, es fundamental que los empleadores implementen programas de promoción y prevención en relación con la salud mental. Estos incluyen actividades como talleres de bienestar emocional, sesiones de capacitación sobre manejo del estrés y técnicas de autocuidado, y la promoción de estilos de vida saludables en el lugar de trabajo. Al fomentar la conciencia y el autocuidado, los empleadores pueden ayudar a prevenir problemas de salud mental antes de que se conviertan en crisis. 

 

Prestar atención a los síntomas  

Las señales no siempre son visibles, pero en un gran porcentaje se pueden detectar gracias a síntomas relacionados con enfermedades que comprometen la salud mental, el estado de ánimo, razonamiento y capacidad de interactuar con los demás. Algunos de los síntomas psicológicos son:  

  • Sentimiento de tristeza, desanimo o desesperanza. 
  • Dificultad de concentración. 
  • Cambios radicales de humor. 
  • Desconexión de la realidad, como alucinaciones o paranoia. 
  • Incapacidad para solucionar problemas cotidianos. 
  • Cansancio, falta de energía para realizar actividades.  
  • Cambios importantes en los hábitos alimenticios.  
  • Problemas con el uso de drogas o alcohol. 
  • Miedo o incomodidad excesiva.  
  • Pensamientos suicidas. 

       Síntomas físicos más comunes:  

  • Tensión muscular.  
  • Dolor de cabeza. 
  • Problemas gastrointestinales.  
  • Erupciones cutáneas. 
  • Insomnio o exceso de sueño.
  • Hipertensión arterial.
     

Staffing, apoyando el rol de la salud mental en el trabajo

 

Desde Staffing se tiene una alianza con la Administradora de Riesgos Laborales (ARL), Seguros Bolívar, por medio de la cual los colaboradores pueden recibir asesoría u orientación sobre las condiciones que afectan su salud mental. 

Asimismo, se ejecutan capacitaciones preventivas a fin de brindar herramientas a los colaboradores en el manejo de las emociones, resolución de conflictos y demás temáticas en la prevención del riesgo psicosocial. Igualmente, se han adelantado campañas para divulgar a los colaboradores los riesgos prioritarios y se brindan consejos de prevención.  

Sin duda, el gran secreto de la salud mental en el trabajo, está en la cultura organizacional. Esta es fundamental en las organizaciones modernas, para fomentar entornos laborales sanos y seguros.